A muchos seguro que os suena la cara de este encanto. Curro es una delicia de niño. Esa forma de mirar, de descubrir el mundo... todo un observador.
Sus papás son muy buenos clientes... de esos que pasan a ser amigos. Las primeras fotos se las hicimos a su hermano y ahora le llegó su turno. Desde muy pequeñitos les hacemos un seguimiento y sus papás están encantados con estos maravillosos recuerdos. Un tiempo hermosísimo que no podemos dejar escapar. Quién puede decir que no a estos ojos... cuando sean mayores sólo querrán agradecerte todo lo que haces por ellos. Esa mirada será inolvidable gracias a las fotografías.
